La política como el bazar


Impera el dios del mercado.

En mi ya larga experiencia observando la política nacional, nunca había visto que la definición aristotélica de la política se olvidara, para seleccionar a los candidatos, en aras de generar una ley de oferta y demanda y de entregarse al dios Hermes del mercado.

Si bien las alianzas existían en forma sutil o discreta o por conveniencias comunes, no había personas importantes en el panorama político que se colocaran en un bazar, ofreciendo sus servicios al mejor postor, sin importarles ni el ideario, ni quién era ese representante y quién lo auspiciaba. En fin, simplemente, como en la economía liberal que tanto critican, “cuánto ofreces y te doy mi figura, mi espectro y mi potencial”.

Ahora resulta que durante algún tiempo Clara Luz, que fue una extraordinaria miembro del PRI, estuvo señalando que ella quería integrarse a un partido que estuviera de acuerdo con sus ideales, muy preclaros y muy lúcidos, de la política en beneficio del estado; pero ahora tiene que firmar un compromiso.

Otros precandidatos se están saliendo del partido donde estaban y se están poniendo en el mercado, a ver quién les ofrece opciones de patrocinarlo, más que de tener una alianza de interés común para la nación.

Si a esto le agregamos que las finanzas y la comunicación, que depende de las anteriores, son muy importantes en la opinión del electorado, ahora también se está involucrando la relación de causa-efecto entre cuánto tienes para la campaña, sin importar quién te lo da, y con base en lo anterior, tomas tu propia decisión, pues por supuesto que las elecciones cuestan y el dios del dinero es importantísimo.

Todo esto lleva como corolario un sentimiento de fatiga social, que se manifiesta en una degeneración del concepto ideal de la política como el arte-ciencia de servir a la comunidad y de entregar su vida al beneficio común, con las jerarquías de lograr la justicia social.

Descartes: Pienso, luego existo… Estoy asombrado de que se ha perdido hasta el estilo en muchos de los precandidatos y de que se han olvidado que en las noches de vigilia lo que preserva la vida es el sentimiento del deber cumplido y de dignidad protegida.

luisetodd@yahoo.com



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