El ferrocarril mexicano


en 1540 Blasco de Garay presentó al emperador Carlos V un esbozo de una máquina de vapor aplicable a la navegación. Y en 1690, Denis Papin consiguió la primer máquina de émbolo, perfeccionada por James Watt en 1767, aplicable a la industria por 1785, a la navegación por R. Fulton en 1807, y a la locomotora por George Stephenson, en 1825.

La Revolución Industrial, iniciada en Inglaterra, gracias a una sociedad dispuesta al cambio, comenzó con la mecanización de la industria textil y la manufacturera, y finalmente, por el transporte de personas y mercancías en locomotoras y barcos de vapor. George Stephenson fundó la primer compañía con la línea Stockton-Darlington en1825, arrastrando coches de pasajeros y una carga de minerales para ser embarcados en la costa.

La construcción de líneas ferroviarias en Europa estimuló el crecimiento industrial por el transporte de materias primas a los centros metalúrgicos y manufactureros. La máquina influyó en el crecimiento de las economías y la reducción en el precio de las mercancías, aparición de nuevos mercados, etc.

En 1830 y 1860, en los Estados Unidos apareció el ferrocarril junto con el barco de vapor, el telar mecánico y el telégrafo. A principios del siglo XIX hubo expansión ferroviaria en Rusia, China, Japón, Australia y Canadá, y hasta después de la primera guerra mundial surgieron el automóvil y el avión para carga y transporte.

En 1837 el gobierno mexicano otorgó al español Francisco Arrillaga la concesión para construir la línea México-Veracruz, que no se logró debido a conflictos internos, la Guerra de los Pasteles con Francia y la muerte del concesionario. Pero bajo el gobierno de Santa Anna, en 1850, se construyeron 14 Km. de vía entre Veracruz y El Molino. Después se intentó comunicar a Veracruz con algún puerto del Pacífico sin resultado, y la familia de don Antonio Escandón negoció un convenio con Juárez, cancelada por las guerras de Intervención y del Imperio. Bajo Maximiliano se concedió a la compañía inglesa F.C. Imperial Mexicana, con subsidio del Estado, la construcción de la vía México-Apizaco, un tramo de 139 Km. que inauguró el emperador. Luego Juárez expidió un decreto a favor de la compañía, otorgándole propiedad perpetua, que fue fuertemente atacado por el gobierno y la prensa, acusándolo de derrochador e imprudente, hasta que lo canceló. En 1869 se inauguró el tramo Apizaco-Puebla y el resto hasta Veracruz en 1872, después del fallecimiento de Juárez.

El 1 de enero de 1873 se inició el viaje inaugural con el presidente Lerdo de Tejada y varios invitados y periodistas. Uno de ellos, del diario “El Federalista” escribió: “La locomotora y su inmensa cauda de vagones van orillando abismos que causan vértigos. A veces el camino está tallado en roca viva, y el tren a veces parece una enorme serpiente que pasa de un cerro a otro”. _



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