Etica y pandemia


Conviene revisar la ética. La situación generada por la pandemia a todas luces a causado males en prácticamente todas las actividades del país, a la mayoría de las personas habitantes de este planeta y dejará secuelas por un largo tiempo. ¿Porqué la ética y no otros temas? Pido prestadas las palabras de la filosofa Margarita M. Valdés publicadas en FGTelevisión Diario Jalisco el pasado 9 de este mes (pp. 16 y 17. Dice la catedrática de la UNAM: “Casi en cualquier momento es pertinente recordar a los ciudadanos y personas la importancia de honrar ciertos valores y respetar ciertos principios si queremos una sociedad más pacífica, más segura, cohesionada, menos violenta.” Más adelante precisa: “En estos momentos es especialmente pertinente por dos razones: por la pandemia que estamos viviendo, una situación que nos ha puesto al límite en muchos ámbitos de la vida (…) Por otro lado estamos viviendo con un gobierno que trae un proyecto… que se propone la transformación moral de la sociedad, y transformar la sociedad quiere decir inculcar, recordar, traer a la discusión los temas sobre los cuales versa la Guía ética para la transformación de México”.

Pandemia y gobierno son dos motivos para la discusión ética. Un tema muy común es la conducta social de las personas. ¿Cómo se obliga a las personas a actuar bajo la inspiración y respeto de los valores y principios que se declaran? El propósito es aceptable con facilidad: Una sociedad pacífica, segura, cohesionada y menos violenta. Las acciones y conductas sociales que encarnan tal propósito es materia muy disputable. Con frecuencia nuestra conducta social no se decide en el marco de ciertos principios y valores. Por ejemplo, ¿es aceptable insultar a los funcionarios del gobierno con base en el desacuerdo con sus políticas? Hoy lo vemos en las redes sociales con frecuencia. Insultar nunca será una conducta respetuosa. Es un desahogo del coraje. Humano sí, ¿ético? ¿moral? Discutir la reunión de principios y valores con conductas sociales puede acabar en mediadas de represión – leyes – a las conductas lejanas de principios declarados y aceptados, “en frio”.

Respeto a la diferencia, cuidado, verdad, dignidad, perdón, libertad, gratitud y otros están incluidos en el recordatorio escrito en la Guía. ¿Acatarlos sólo con leyes? Revisemos la ética y cómo la hacemos vida. Nada fácil.



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