Significa que United permanece segundo en la tabla, un punto detrás de sus rivales Manchester City, mientras que Sheffield United se mantiene al final, a 10 puntos de evitar el descenso.
Y luego, el técnico del Manchester United, Ole Gunnar Solskjaer, expresó lo «decepcionado» que estaba con la actuación después de que su racha de 13 partidos sin perder llegó a su fin.
«Esa pequeña chispa, esa ventaja, no teníamos esa creatividad, imaginación, el factor X que teníamos, sucedió, lo miramos, estamos de acuerdo en que no es lo suficientemente bueno y volvemos.
«No hay tiempo para sentir lástima por ti mismo porque el sábado vas de nuevo, tenemos al Arsenal, tenemos que olvidar esto, aprender de ello y seguir adelante».
Falta de inspiración
Recién llegado de una dramática victoria en la Copa FA sobre sus feroces rivales Liverpool el domingo y con la motivación adicional de que podría superar a otros rivales del Manchester City con una victoria, un partido en casa contra el humilde Sheffield United parecía un paseo por el parque.
Sobre todo porque los peces gordos de Marcus Rashford, Anthony Martial, Mason Greenwood, Bruno Fernandes y Paul Pogba estaban en la alineación inicial.
Sin embargo, a pesar de dominar la posesión en todo momento, el grupo de superestrellas del Manchester United careció de inspiración y creatividad para desbloquear a la robusta defensa de Sheffield, que llegó al juego con el peor récord, después de 19 partidos, en la historia de la Premier League.
Y fue el equipo de la parte inferior de la tabla el que finalmente sorprendió a su anfitrión para tomar la delantera, el cabezazo de Bryan en la primera mitad para el equipo de Yorkshire que pasó furtivamente a David De Gea en el gol del Manchester United.
A Anthony Martial se le descartó el empate ya que se determinó que Maguire cometió una falta al portero de Sheffield, Aaron Ramsdale, pero finalmente empató a los lados y se dirigió justo después de la hora.
Y a pesar de que los locales aumentaron la presión, la defensa del Sheffield United formada por tres centrales (Chris Basham, Ethan Ampadu y Phil Jagielka, de 38 años) se mantuvo firme, contribuyendo con 18 despejes entre ellos.
Finalmente, la porosa defensa del Manchester United se quebró, ya que el 74º triunfo desviado de Burke envió al equipo visitante al júbilo, ya que aseguró solo su segunda victoria de la temporada.
El ganador del partido Burke expresó su alegría por el resultado.
«Demostramos un gran coraje y una gran determinación. Demostramos un gran carácter y nunca nos detenemos, en cada partido hemos mostrado un gran fútbol, pero no hemos conseguido tres puntos».
Además de la derrota del Manchester United, la locura de esta temporada se ha visto acentuada por la caída en la forma del actual campeón, el Liverpool.
El equipo de Jurgen Klopp no ha ganado en sus últimos cinco partidos de liga, y su última mala actuación se produjo cuando perdió 1-0 en casa ante Burnley, su primera derrota en casa en 69 partidos de la Premier League desde que perdió 1-2 ante Crystal Palace en abril de 2017. Se enfrenta al Tottenham de José Mourinho el jueves por la noche buscando rectificar esa mala forma.
En otra parte, el miércoles por la noche, un aullador de Jordan Pickford le dio al Leicester City un empate contra el Everton, mientras que el primer juego de Thomas Tuchel como técnico del Chelsea terminó en un empate 0-0 con los Wolves.