En Roma, varias manifestantes fueron detenidos por la policía tras participar en una concentración, inicialmente pacífica, que se tornó violenta debido a las medidas restrictivas aprobadas para contener el rebrote de covid-19 en Italia.
Desde hace días se suceden en todo el país concentraciones y manifestaciones de dueños de restaurantes, comerciantes, taxistas, o propietarios de gimnasios, cines y teatros, que muestran su malestar por las recientes medidas aprobadas por el gobierno.
El último decreto establece desde ayer y hasta el 24 de noviembre el cierre de cines, teatros, salas de concierto, congresos, piscinas o gimnasios, así como la prohibición de abrir más tarde de las 18:00 locales a bares y restaurantes, entre otras cosas.
Este martes un grupo de comerciantes y dueños de restaurantes se estaba manifestando pacíficamente en la Plaza del Popolo de Roma, cuando un grupo de entre 200 y 300 simpatizantes de la formación neofascista Forza Nuova comenzó a provocar disturbios, según los medios italianos.
Estas personas quemaron contenedores y lanzaron objetos a la Policía, que respondió con cargas y mangueras de agua. Según las informaciones locales, la Policía ha confirmado que hay varios detenidos, si bien por el momento no se sabe cuántos.
Más protestas en todo el país
En Turín, en el norte del país, algunos manifestantes se separaron de una protesta pacífica y rompieron los escaparates de una elegante calle comercial, activando bombas de humo y arrojando botellas contra policías en la plaza principal de la ciudad, donde se ubica la sede del gobierno de la región de Piamonte, reportó la televisora estatal RAI.
Un fotógrafo resultó herido por una botella, informó la RAI. La policía lanzó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes en la Piazza del Castello.
Horas antes en esa misma plaza, unos 300 taxis se formaron de forma pacífica para atraer la atención a sus pérdidas económicas que se derivan de la falta de turismo y la desaparición de trabajadores del centro de la ciudad, pues están laborando de forma remota debido a la pandemia.
Detrás de los actos de violencia en Turín había un grupo de “ultras”, como se les conoce a los aficionados violentos al fútbol, reportó la agencia noticiosa LaPresse, que añadió que cinco de los manifestantes fueron detenidos por las autoridades.
En la capital de negocios del país, Milán, la policía usó gases lacrimógenos para dispersar a manifestantes la noche del lunes, en que al menos dos personas fueron arrestadas.
La semana pasada, una marcha pacífica de comerciantes y empresarios en Nápoles, molestos por el toque de queda regional que ordena a los ciudadanos permanecer en casa después de las 11 de la noche, se tornó violenta cerca de la sede de gobierno de la región de Campania.
Según la prensa italiana, algunos investigadores declararon que los actos de violencia, en los que resultaron heridos algunos agentes de la policía, tenían el sello de la Camorra, el grupo local del crimen organizado.
La policía en la capital financiera italiana de Milán arrestó a 28 personas después de que las protestas se tornaron violentas el lunes por la noche, cuando la policía bloqueó su marcha hacia la sede del gobierno regional.
dmr