Hoy a la madrugada terminé de ver la serie “Merlí”, la cual estará por unos cuantos días más dentro de las opciones que nos entrega la plataforma de contenido streaming que se ha vuelto cada vez más popular en el mundo: Netflix. Hace mucho tiempo que no me emocionaba tanto al ver una serie tan significativa y que, a pesar de ser una producción catalana, con un idioma y un elenco desconocido para mí, no olvidaré nunca.
Pero, ¿de qué trata? Su argumento es muy simple pero muy inspirador: del legado que deja un profesor a sus alumnos; no es un misterio el hecho de que siempre he sentido cierta fascinación por los sueños, las personas que luchan por ellos y aquello que se genera con el paso del tiempo.
Si aún no han visto esta serie se las recomiendo no solo para que recuerden cuando estábamos en la escuela, sino que incluso podrán verla aquellos que hoy no pueden estar ahí debido a la pandemia. Debo confesar que lo que más me gustó a lo largo de estos 40 episodios repartidos en tres temporadas fueron las frases célebres del protagonista Merlí Bergeron como:
“Que la vida sea absurda no implica que debamos caer en una profunda apatía”; “que las cosas sean de una manera no significa que no se puedan cambiar”; “no tiene sentido que nos preocupemos por la muerte. Mientras existimos la muerte no está presente.
Y cuando la muerte se presenta, es que ya no existimos”; “hace más de 2 mil años que el poder nos dice qué tenemos que hacer y pensar…nos quieren sumisos y silenciosos”, estas son solo algunas y podría seguir. En estas semanas me encantó olvidarme por un momento del coronavirus, del rebrote y de las malas noticias; creo que son en estos momentos en los que debemos rodearnos de contenidos valiosos, aquellos que nos den más ganas de vivir y nos hagan respirar con más paz.
La realidad es que hoy en día, debido a la pandemia, nos hemos convertido en seres extraños, sin horarios y con desórdenes del sueño… Últimamente sabemos más de la muerte y creo que debemos parar y avivar nuestros sueños en vez de tener pensamientos negativos y miedo.
Esta serie es como uno de esos momentos felices que permanecen, que nos dejan con mil reflexiones y una sonrisa por habernos hecho descubrir más de nosotros mismos, quizá aquello que no sabíamos: la serie “Merlí” es un poema hecho serie, una rima que se puede ver y que me ha entregado otra perspectiva de vida pues, a pesar de los momentos difíciles por los que está pasando el mundo entero, aún se puede cambiar la visión que tenemos para seguir soñando. _