FICM. Bárbara Mori con Todo lo invisible, historia sobre la ceguera


Caminar por las calles de la mano de Bárbara Mori con los ojos venados y formar parte de una cena a oscuras para estimular los sentidos fueron algunas de las experiencias que tuvo Ari Brickman previo a interpretar a su personaje en Todo lo invisible, una historia sobre la ceguera que este año compite por el premio al Mejor Largometraje Mexicano en la decimoctava edición del Festival Internacional de Cine de Morelia.

“Recuerdo que le dije a Ari que estaría padre salir a la calle con Mariana (Chinillo, la directora) para experimentar un poco lo que es ser ciego y que alguien te ayude, sacarnos del guión para enfrentar la realidad y ver qué sentimos y qué ocurre, todo eso nos dio elementos que llevamos a las escenas, fue muy bonita la dinámica porque caminamos varias cuadras para generar esa confianza, la atmosfera real”, dijo Bárbara Mori.

Mariana Chenillo desarrolló el guión de esta historia en colaboración con Ari Brickam, en la que exploran la vida de Jonás, un hombre que pierde la vista en un accidente automovilístico, justo cuando la bolsa de aire le explota en la cara tras frenar intempestivamente, este momento le genera conflictos que tendrá que superar, sobre todo con su esposa Amanda, rol que estuvo a cargo de Bárbara Mori. 

“Todas estas experiencias sumaron al personaje, literal me sacó a pasear en la ciudad, fuimos por unos tacos y en el camino enfrentamos todas las situaciones de no poder ver; de hecho, otras de las experiencias fue que Bárbara organizó una cena con un chef que es ciego y que cocina increíble, una de las particularidades fue que en esa cena todo te lo servían meseros que también eran ciegos”, recordó Brickman.

“Todo era un espacio oscuro donde teníamos los ojos vendados, no sabíamos qué íbamos a comer, dónde estaban los platos, sentías con las manos, fue todo muy sensorial y fue como poder experimentar un poco el mundo de los ciegos, saber qué sienten cuando comes algo que no sabes qué es y tratas de identificarlo y saborearlo, los olores, en fin, fue todo muy sensorial”, agregó Mori, sobre esta experiencia con el chef Marco Margain.

Cuando un sentido se pierde “el resto se activan y potencian”, explicó Bárbara Mori para referirse también a su propia experiencia de vida, “yo tengo un problema en el oído derecho desde hace tiempo, así que siento que con el oído izquierdo empecé a escuchar muchísimo más; al privar un sentido como la visión, el resto de los sentidos como el gusto o el tacto cobran más fuerza, se intensifican, es una cosa extraña, pero pasa”. 

Todo lo invisible surgió de una inquietud de Mariana Chenillo para entender cómo enfrentaría la vida si perdiera la vista, ya que “tuve algunos temas relacionados con los ojos, se me desprendió la retina y me pasaron otras cosas; así que, el proceso de escribir la historia me llevó por este camino, de encontrar la parte esperanzadora, pero no la respuesta fácil de ‘piensa positivo’ como todos dicen”, dijo la cineasta.

“Este hombre es dentista y esa vida ya no la podrá recuperar, no existe y no por el hecho de pensar positivo la va a recuperar; así que, la escritura de la película no va por la positividad, sino por el tema de que la vida sigue y las cosas duras, las adversidades, te convierten en otra persona, por eso queríamos ver las cosas con empatía, equilibrar la fuerza y la vulnerabilidad, porque eso nos hace falta como sociedad”, agregó Chenillo.

Todo lo invisible es una de las nueve películas que forman parte de la competencia principal del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) que, este año y pese a la pandemia, realiza su edición número 18 de forma híbrida, con eventos presenciales en los que se contemplan los debidos protocolos sanitarios, así como algunos eventos virtuales y funciones gratuitas a través de la página del FICM, FilminLatino y Cinépolis Click.

Previo a su llegada al festival de cine de Morelia, Bárbara Mori concluyó el rodaje de Tú eres mi problema, una historia dirigida por Álvaro Curiel que se filmó durante las últimas semanas en Baja California, “terminamos ayer esta historia que protagoniza Santiago barajas, quien es una belleza de actor, él es mi hijo en la historia, tiene quince años y la película va sobre la relación entre una madre y su hijo adolescente”.

amt



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