La tremenda corte


Filoso estuvo el gobernador Enrique Alfaro en su discurso de inauguración de la edición 2020 de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara. Y es que el mandatario dijo, en la segunda mitad de su reflexión, que “los libros hacen que las mentiras tengan fecha de caducidad. Dentro de ellos yacen las ideas que pueden derrumbar el engaño. Y eso, precisamente eso, enfurece a los totalitarios; a los identitarios; a los fundamentalistas; a los que quieren abrir las heridas de un pasado que nos duele, para convertir el odio de las personas en capital político”. Por eso, dijo el gobernador, “cuando los liberales (haciendo señas de comillas) que pretenden reconstruir a la nación con guías morales, le dicen a la FIL conservadora, lo único que hay que hacer es sonreír ante lo ridículo”. Claridoso, y filoso, pues.

A quien muchos traen bajo la lupa es a Lucía Almaraz, expresidenta del Consejo de Participación Social de Jalisco, pues consideran que la abogada se ha extralimitado en sus declaraciones sobre casos que revisó dicho comité anticorrupción, pues tendrían que estar bajo la secrecía legal, y no en medios de comunicación. Tan atentos están a lo que dice, que han pedido revisión de sus dichos para ver si encuentran alguna falla con la que puedan proceder contra ella. Incluso consideran que la doctora lo que busca es convertirse en candidata a presidente municipal por uno de los nuevos partidos. ¿Será?

Poco les duró el gusto a las feministas que colocaron la Antimonumenta en la Plaza de Armas la semana pasada. Y es que aunque la pieza central sigue allí, manos desconocidas retiraron (¿se robaron?) la placa que también fue colocada en el piso frente a la escultura, donde se rebautizaba el lugar como Plaza Imelda Virgen, y se hacía un llamado de conciencia contra la violencia a las mujeres. A ver si alguien sabe qué pasó con dicha placa, y si logran recuperarla.

Ayer se supo que ya desde Europa han salido aviones con destino a Estados Unidos con las primeras dosis de vacunas de la empresa Pfizer, a la espera de que se autorice su aplicación. No está claro cuándo llegarían a México, pero lo que sí entendemos es porqué en Jalisco, gobierno y universidad ya trabajan para una eventual distribución.

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