Un testigo en las protestas, Akinbosola Ogunsanya, dijo que el tiroteo comenzó después de que se apagaran las luces en el peaje de Lekki en la ciudad nigeriana. «Los miembros del ejército nigeriano se acercaron a nosotros y empezaron a disparar», dijo. «Ellos disparaban, disparaban directamente, directamente contra nosotros, y mucha gente fue alcanzada. Yo sobreviví, apenas».
Ogunsanya agregó que las barricadas a ambos lados de la escena bloqueaban las ambulancias.
Otro testigo, Temple Onanugbo, dijo que escuchó lo que él creía que eran balas disparadas desde su casa cercana y que el sonido duró «entre 15 y 30 minutos».
En declaraciones a FGTELEVISION desde la escena del tiroteo, Onanugbo dijo que vio «varios cuerpos tirados en el suelo» cuando llegó para ayudar a los heridos.
FGTELEVISION aún no ha podido confirmar las bajas.
El gobierno del estado ha ordenado una investigación sobre el incidente, según el portavoz del gobernador de Lagos, Gboyega Akosile. Según un tuit de Akosile, el gobernador de Lagos, Babajide Sanwo-Olu, también «aconsejó a los agentes de seguridad que no arresten a nadie debido al toque de queda».
Horas antes, Sanwo-Olu había impuesto un toque de queda de 24 horas, incluido el cierre de todas las escuelas de Lagos. Solo los proveedores de servicios esenciales y los socorristas tienen permiso para estar en las calles de Lagos, que tiene una población estimada de más de 20 millones de personas.
«Queridos habitantes de Lagos, he observado con sorpresa cómo lo que comenzó como una protesta pacífica #EndSARS se ha degenerado en un monstruo que amenaza el bienestar de nuestra sociedad», tuiteó Sanwo-Olu al anunciar el toque de queda a las 4 pm (hora local). .
Desde el fin de semana se han reportado muertes y heridas graves en medio de las protestas.
Amnistía Internacional dijo el martes en su cuenta de Twitter que ha recibido «pruebas creíbles pero inquietantes» de «uso excesivo de la fuerza que ocasionó la muerte de manifestantes».
Un joven de 17 años murió el lunes bajo custodia policial en Kano, una ciudad del norte del país, luego de haber sido presuntamente torturado, según el grupo de derechos humanos. Muchos manifestantes y periodistas fueron agredidos por policías y matones en la capital, Abuja, el mismo día. Los videos en las redes sociales muestran decenas de autos pertenecientes a manifestantes en llamas y Amnistía Internacional dijo que tres personas murieron.
«Mientras seguimos investigando los homicidios, Amnistía Internacional desea recordar a las autoridades que, según el derecho internacional, las fuerzas de seguridad solo pueden recurrir al uso de fuerza letal cuando sea estrictamente inevitable para protegerse de una amenaza inminente de muerte o lesiones graves», tuiteó Amnistía. .
Otros videos muestran una fuga masiva de cientos de prisioneros del Centro Correccional de Benin en el estado de Edo en el sur de Nigeria. No está claro quién es el culpable de la fuga, y los manifestantes afirman que fue organizada por la policía. La Policía de Nigeria dijo en un tuit que los manifestantes se llevaron armas y municiones de la armería antes de liberar a los sospechosos bajo custodia e incendiar las instalaciones.
El gobernador del estado de Edo, Godwin Obaseki, impuso un toque de queda el lunes y tuiteó sobre «incidentes perturbadores de vandalismo y ataques a personas e instituciones privadas por parte de matones disfrazados de manifestantes de #EndSARS».
Se ha desplegado policía antidisturbios en todo el país. Según un tuit de la Fuerza de Policía de Nigeria el martes por la noche, el Inspector General de la Policía de Nigeria ordenó el despliegue nacional inmediato de agentes de la policía antidisturbios «para proteger las vidas y propiedades de todos los nigerianos y asegurar la infraestructura nacional crítica en todo el país. «