Tampico. Comunidad libanes y su contribución al desarrollo económico



Los libaneses provenientes de la costa oriente del Mediterráneo, migraron a México entre finales del siglo XVIII y principios del XIX y llegaron a Tampico trayendo consigo un espíritu inquebrantable y un profundo amor al comercio. 

Han pasado 160 años desde que empezaron a arribar al puerto los primeros barcos con aquellos migrantes que buscaban escapar de condiciones adversas en su tierra y fueron atraídos por el auge petrolero de México. 

Jorge Marón Ceja, gerente del hotel Impala, recuerda que su abuelo llegó a la edad de cinco años a Tampico y se involucró en el comercio al igual que sus paisanos. 

“Desde muy pequeño Jorge Marón Nader se dedicó al comercio, lo traemos en la sangre todos los libaneses. Inició con un pequeño negocio llamado La Moderna, en donde hoy está la tienda Del Sol”. 

Años más tarde se asocian los hermanos Jorge y Elías Marón Nader para edificar el Hotel Impala. En cada hogar el padre inculcaba la cultura del trabajo a sus hijos. 

“Nos decían debes ganártelo; desde niños trabajamos en el hotel, limpiando mesas en el restaurante o lavando coches y ventanas”.

Era prometedor Tampico les permitió desarrollar proyectos que contribuyeron a detonar la economía, lo que generó fuentes de empleo que beneficiaron a muchas familias, recuerda a su vez Eduardo Manzur Manzur. 

El ex presidente del Consejo de Instituciones Empresariales del Sur de Tamaulipas (Ciest), comenta que la historia de su familia va muy ligada a la fundación de Tampico, ya que su abuelo José Manzur cruzó el océano Atlántico a los 14 años para venir a este país que era muy prometedor por la extracción del petróleo en esa época. 

A su llegada abrió su propio negocio de ropa, “El Correo Mercantil” que sería el pilar de las empresas de la familia, menciona el propietario de la tienda Avante Costumbres ya no tan arraigadas 

Los libaneses en Tampico 

Los libaneses no suelen festejar como los chinos fechas significativas de su país de origen, pero sí realizan las conmemoraciones mexicanas. Ya son cinco generaciones en México, refiere Manzur Manzur

Dice que en sus empresas, padres e hijos se involucran en la buena marcha de las mismas, buscando conservar el patrimonio familiar. Algunas de sus costumbres han quedado atrás con el paso del tiempo. 

Jorge Marón menciona por ejemplo, que a él nunca lo obligaron a casarse con una integrante de su comunidad o a estudiar la carrera de Comercio. 

Historia del pueblo libanés 

Los primeros libaneses comenzaron a llegar a México durante el periodo de 1860 a 1914, cuando más de un millón de ellos emprendieron el éxodo al continente americano. Durante esa época, nuestro país recibió cerca de 20 mil.

​lpr



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