Los paleontólogos descubrieron los restos fosilizados de un titanosaurio de 98 millones de años en la provincia de Neuquén, en el noroeste de la Patagonia argentina, en depósitos sedimentarios gruesos conocidos como la Formación Candeleros.
Se cree que las 24 vértebras de la cola y los elementos de la cintura pélvica y pectoral descubiertos pertenecen a un titanosaurio, un grupo diverso de dinosaurios saurópodos, que se caracteriza por su gran tamaño, un cuello y cola largos y una postura de cuatro patas.
«Es un dinosaurio enorme, pero esperamos encontrar mucho más del esqueleto en futuras excursiones, por lo que tendremos la posibilidad de abordar con confianza lo grande que era», Alejandro Otero, paleontólogo del Museo de La de Argentina. Plata, le dijo a FGTELEVISION por correo electrónico.
Se han encontrado fósiles de titanosaurios en todos los continentes excepto en la Antártida. Pero las variedades más grandes de la especie «de varias toneladas», incluidos los titanosaurios que superan las 40 toneladas, se han descubierto principalmente en la Patagonia.
Sin analizar el húmero o el fémur del dinosaurio, los expertos dicen que aún no es posible decir cuánto pesa la criatura. Sin embargo, el dinosaurio parcialmente recuperado «puede considerarse uno de los titanosaurios más grandes», dijeron los expertos, con una masa corporal probable superior o comparable a la de un Patagotitan o Argentinosaurus.
Los patagotitanos pueden haber sido el animal terrestre más grande del mundo de todos los tiempos, y pesaron hasta 77 toneladas, mientras que los Argentinosaurus eran igualmente gigantescos, medían hasta 40 metros (131 pies) y pesaban hasta 110 toneladas, pesando más de 12 veces más. que un elefante africano (hasta 9 toneladas).
Los expertos creen que el espécimen sugiere fuertemente la coexistencia de titanosaurios más grandes junto con titanosaurios de tamaño mediano y rebbachisáuridos de tamaño pequeño al comienzo del período Cretácico Superior, que comenzó hace 101 millones de años.
«Estas diferencias de tamaño podrían explicar la existencia de tal diversidad de saurópodos en la Cuenca Neuquina durante el Cretácico Superior en términos de partición de nichos», escribieron.
Los investigadores dijeron que, aunque no creen que la criatura pertenezca a una nueva especie, hasta ahora no han podido asignarla a un género conocido de dinosaurio.
The research was conducted by Argentina’s The Zapala Museum, Museo de La Plata, Museo Egidio Feruglio and the universities of Río Negro and Zaragoza.