Que ayer hubo dos mensajes presidenciales inequívocos, más allá de guiños, para las fuerzas armadas, uno en voz propia y otro mediante el senador Ricardo Monreal. En el primer caso, Andrés Manuel López Obrador aplaudió las obras de Defensa y Marina y remató: “El Ejército nos sacó del hoyo”. En el segundo, se dio a conocer una iniciativa para regular la actividad de los agentes extranjeros, léase DEA, después del escándalo con la detención del general Salvador Cienfuegos en el aeropuerto de Los Ángeles.
Que si bien el Presidente encomendó al secretario de Marina, José Rafael Ojeda, la operación de puertos para acabar con la corrupción, necesariamente tuvo que tocar la puerta de Irma Eréndira Sandoval, titular de la Función Pública, quien ayer encabezó la creación de un grupo multidisciplinario, junto con el jefe de Aduanas, Horacio Duarte, y la directora de Administración Portuaria, Rocío Bárcena, para diseñar el combate a la corrupción en esas áreas estratégicas.
Que hay quienes ya entraron en pánico en el Senado, que preside Eduardo Ramírez, por la ola de contagios en Ciudad de México, por lo que pidieron tomar las preocupaciones en las tres sesiones de la próxima semana, que incluyen limitar aún más la presencia de los llamados (por los propios legisladores) “cargabolsas” y “cargatermos” en las citas de comisiones. Para poder ingresar al pleno, continuarán aplicándose las pruebas a fin de prevenir la propagación.
Que la desintegración de una decena de bandas de distintas nacionalidades dedicadas al robo de casa-habitación y 90 por ciento de aumento en patrullas, resultando lo anterior en una caída de 47 por ciento en ese delito, son cartas que exhibe Víctor Hugo Romo por su segundo informe de gestión como alcalde de Miguel Hidalgo, en la capital, pero con la mira puesta en la reelección candidateado por Morena y PT a juzgar por sus mensajes en redes sociales. A ver.