Los vuelos entre Singapur y Hong Kong seguirán adelante como parte de la burbuja de viajes planificada que comienza el 22 de noviembre, a pesar del reciente aumento de casos de Covid-19 en Hong Kong.
Sin embargo, habrá medidas adicionales, según la Autoridad de Aviación Civil de Singapur (CAAS).
Los viajeros de Hong Kong deberán someterse a una prueba de PCR Covid-19 al llegar al aeropuerto de Changi que costará 196 dólares de Singapur (145 dólares), excepto la primera semana, para dar tiempo a los viajeros para «adaptarse a este cambio». Los viajeros deberán aislarse por sí mismos hasta que reciban los resultados, lo que llevará entre seis y ocho horas.
«El requisito adicional es una medida de precaución dado el aumento de casos de COVID-19 en Hong Kong durante los últimos días, y está previsto en el acuerdo ATB Singapur-Hong Kong», dijo CAAS.
La burbuja de viajes se suspenderá si el promedio de siete días de casos no vinculados, o casos de origen desconocido, supera los cinco por día, agregó CAAS. El promedio actual de Hong Kong es 2,14.
«El umbral se excederá si hay más de 22 casos no vinculados en Hong Kong durante los próximos tres días. Esto activará un período de notificación de dos días, después del cual la suspensión entrará en vigencia», dijo un comunicado de prensa de la CAAS.
Si esto sucede, habrá un aviso de dos días antes de que se suspenda la burbuja y se aplicará un Aviso de estancia en casa (SHN) de siete días para los viajeros de Hong Kong a Singapur.
«Hong Kong tiene un sistema integral de vigilancia de la salud pública y la tasa de incidencia general sigue siendo baja», dijo CAAS.