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En Tamaulipas persiste una brecha laboral de género, lo que se refleja desde el sueldo que devengan las mujeres así como su acceso a las prestaciones que marca la Ley Federal del Trabajo.
De acuerdo con el Observatorio Laboral del gobierno federal, en el estado se tiene un registro de 274 mil 805 profesionistas ocupados, con un ingreso mensual promedio de 11 mil 723 pesos.
De estos, el 53.1 por ciento son hombres y el 46.9% mujeres, pese a que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía muestra que hay más féminas en el censo de población.
Hay estados que tienen una mayor presencia de mujeres profesionistas ocupadas, como Tlaxcala, Oaxaca, Hidalgo, con porcentajes del 50.4%, 51.3% y 52.5% respectivamente.
En contraparte, las entidades con menor participación son Yucatán, Nuevo León y Coahuila, con 43%, 42.5% y 42.7%.
Facilidad de créditos de vivienda para mujeres
Al respecto, el abogado laboralista Juan Carlos Ley Fong, dijo que la brecha de género es una realidad actualmente.
Indicó que las mujeres suelen ganar menos que los hombres y por lo mismo les resulta más complicado mejorar sus prestaciones laborales, como el acceso a la vivienda.
Es una situación que, dijo, tiene bien detectada el Infonavit y por tal motivo se impulsan créditos de vivienda con perspectiva de género para apoyar a quienes siguen en desventaja.
«Infonavit detectó hasta ahora que las mujeres tienen poco respaldo para obtener el crédito y está manejando la posibilidad de aplicar créditos hipotecarios con perspectiva de género».
Enfatizó que existe todavía esa discriminación salarial, pese a estar en las mismas categorías de cargos. No tienen el mismo ingreso que sus compañeros varones en muchos casos y su tope en algunas empresas es por debajo de los diez mil pesos al mes así tengan la misma preparación.
La solución, dijo, es modificar la ley, porque existen datos de que hombres en edades de 22 a 24 años son más beneficiados que mujeres de 30 a 35 años al momento de solicitar un crédito de vivienda.
Las trabajadoras se ven a veces obligadas a esperar hasta diez años para tener acceso a un crédito, cuando los varones batallan menos.
«Mujeres jefas de familia que son el único sustento de su hogar tienen este problema de diferencia salarial, lo que se refleja en una menor aportación y a crédito de Infonavit».
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