Humanizando la deportación


Según cifras del Consejo Nacional de Población se estima que en 2012 residían en Estados Unidos alrededor de 12 millones de mexicanos, y sumando a los de segunda y tercera generación, la cifra aumentaría a un aproximado de 34 millones de personas.

La dificultad para todos aquellos que han ido al vecino país a cumplir su sueño americano ha sido el poder obtener una estancia legal. Para muchos de los migrantes, este proceso ha terminado en su deportación; en las últimas dos décadas se han encontrado con un incremento de políticas restrictivas a la legalidad de la estancia de extranjeros en territorio americano.

Las cifras del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos indican que los mexicanos que regresan voluntariamente a su país natal son cada vez menos. Actualmente aumentan las deportaciones involuntarias. Las autoridades buscan nuevos motivos para deportarlos, sin que tengan derecho a un debido proceso. Dentro de estos motivos también aparece el nuevo coronavirus, como una excusa más para crear xenofobia y rechazo al migrante.

El proyecto comunitario Humanizando la deportación (http://humanizandoladeportacion.ucdavis.edu/es/) nos permite entender diversos procesos de retorno obligado. En sus narrativas, los migrantes consideran que regresar a México ha sido un retroceso, expresando la falta de oportunidades laborales y de bienestar social. Es aquí donde las redes sociales han jugado un papel de soporte, dando a los migrantes la capacidad de resiliencia que los llevó a superar una separación familiar o una pérdida económica. Algunos han encontrado formas de remediar los males y salir adelante con ayuda de sus familiares, y con atención brindada por organizaciones civiles. Desde sus narrativas se evidencia la ausencia del Estado mexicano en un proceso de retorno y reinserción exitoso.

Es de vital importancia para México crear estrategias claras para los retornados, estrategias laborales, educativas y de desarrollo humano que permitan al migrante ser de nuevo un ciudadano productivo y capaz de superar su deportación.

Yuliet Bedoya Rangel

Iinso-UANL

sociedad.sustentable.iinso@gmail.com



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